Ricardo Quintela: "El PJ estaba tomado"

El gobernador de La Rioja denunció que la Junta Electoral del Partido Justicialista desconoció miles de avales de su lista y permitió irregularidades en favor de Cristina Kirchner. Según el mandatario provincial, su candidatura fue obstaculizada a pesar de cumplir con los requisitos, y aseguró que llevará el caso a la justicia para garantizar que los afiliados del PJ tengan el derecho a votar.

Ricardo Quintela, gobernador de La Rioja, explicó en Radio Rivadavia los conflictos que surgieron en la interna del Partido Justicialista, donde disputaba la presidencia con Cristina Kirchner. Quintela denunció que su equipo presentó los avales requeridos, pero que "desaparecieron 14.000 avales" en circunstancias poco claras. Según el gobernador, el soporte informático con las firmas estaba completo, y además él tenía una copia del documento, pero la Junta Electoral desconoció la validez del mismo. "Nosotros tenemos el soporte informático, la totalidad de los avales fue presentada", afirmó, señalando que este obstáculo parece haber sido una maniobra para deshabilitar su participación en la competencia por el liderazgo del PJ.

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Quintela también aseguró que recibió presiones para abandonar su candidatura y unirse a una lista de unidad con Kirchner, a pesar de haber realizado una extensa campaña por distintas provincias. "No podíamos a esta altura, después de haber caminado tanto, simplemente arreglar", expresó, aludiendo a su recorrido por lugares como Jujuy, Salta, Chaco, San Juan, y Neuquén. La propuesta de Quintela buscaba reavivar el PJ con una estructura verdaderamente federal y revitalizar el contacto del partido con la ciudadanía. Para él, era esencial proponer un enfoque "que se conforme desde el interior hacia el centro" del país, resaltando la necesidad de incluir a nuevas generaciones en la toma de decisiones del partido.

Ante la pregunta sobre el futuro del conflicto, el gobernador enfatizó que llevará el caso a la justicia porque considera indispensable que se permita a los afiliados votar en una elección democrática. Quintela destacó la relevancia del PJ como el partido más importante de Sudamérica, con más de tres millones de afiliados, y dijo: "Queremos elecciones, queremos que se expidan los afiliados". Según él, la conducción del movimiento debería ser decidida por una amplia base de militantes, en lugar de ser controlada por un reducido grupo de dirigentes.

En cuanto a las acusaciones de la lista de Kirchner, que argumentaba que su equipo no había subsanado las observaciones de la Junta Electoral, Quintela negó estas afirmaciones. "Di la orden de que no se presentara ningún papel más, porque eso es reconocer que faltaba y nosotros no faltaba absolutamente nada", aclaró. Para Quintela, la Junta Electoral estaba predispuesta a impedir su candidatura, dado que "prepararon el camino para tomar la propuesta B", que implicaba su exclusión y la continuidad de la lista única de Kirchner.

Quintela también explicó que, durante el proceso, sus representantes no tuvieron acceso libre a las instalaciones del partido, ya que la sede estaba "tomada" por la lista rival. Relató que "10 días antes, los representantes de la otra lista estaban instalados en el partido cuando no correspondía", destacando que las instalaciones debían ser neutrales para garantizar la transparencia del proceso. Según él, el control de la sede fue uno de los mecanismos que utilizó la lista de Kirchner para inclinar la balanza en su favor, "preparando el camino para evitar la competencia".

La conversación se desvió brevemente hacia la controversia sobre los medios de comunicación y la cobertura de las provincias. Quintela rechazó las acusaciones de querer limitar el acceso de medios nacionales a La Rioja, aunque insistió en que "los medios nos intoxican muchas veces con la mala información, con la información permanente negativa". El gobernador criticó la tendencia de los medios a retratar a las provincias con clichés y estereotipos, y sostuvo que muchas veces "nos consideran feudos, lo peor de Argentina", sin comprender las realidades locales.

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Cuando el periodista sugirió que sus críticas a los medios se asemejaban a las de Javier Milei, Quintela se distanció de esa visión. "Yo no estoy en contra del periodismo independiente y libre", afirmó, y defendió la importancia de que los medios reflejen la diversidad de experiencias en todo el país, más allá de lo que ocurre en la Capital Federal. Para él, los medios nacionales deberían adoptar un enfoque más inclusivo y representativo en lugar de centrarse únicamente en las historias que suceden en el centro del país.

Finalmente, Quintela hizo referencia a su propuesta de reforma constitucional en La Rioja, la cual fue interpretada por algunos como una amenaza a la libertad de prensa. El gobernador negó esa acusación y explicó que los cambios en la Constitución provincial no incluían ninguna limitación a los medios de comunicación, sino que estaban orientados a reconocer derechos básicos para los ciudadanos, como el acceso al agua, la energía y la conectividad.

Fuente: Rivadavia