La Biblioteca Nacional, a 27 años de su apertura, ahora es Monumento Histórico

Fue inaugurada en 1992. El Gobierno también distinguió a otros tres edificios exponentes del estilo Brutalista.

"Cuando se hacían las excavaciones para montar la estructura apareció un gliptodonte. A tres metros de profundidad, la máquina cortó y quedó un semicírculo. Era el caparazón de un gliptodonte", repetía Clorindo Testa, un hombre que todas las mañanas se vestía de traje gris y tomaba café en el mismo lugar, pero explotaba de genialidad en sus diseños. Recurría siempre a ese recuerdo para hablar de la Biblioteca Nacional, una de sus obras más reconocidas, amada y odiada por muchos, que estuvo 20 años en obra y ayer fue declarada Monumento Histórico Nacional.

Ante periodistas, arquitectos o estudiantes decía: "Si se busca la imagen de un gliptodonte y se la compara con la Biblioteca hay poca diferencia.

Están parados en cuatro patas y los dos tienen caparazón. No sabemos si nuestro inconsciente descubrió el gliptodonte y lo expresó. O si la biblioteca es un gliptodonte que reeemplazó al otro", repetía.

"Uno dice Monumento Histórico Nacional y en forma automática quien escucha piensa que la referencia es a una construcción que tiene 100 años o más. Con esta designación, quisimos entrar en lo más contemporáneo.

Quisimos destacar que un edificio hecho en la segunda mitad del siglo XX pueden tener el mismo valor patrimonial que un edificio del siglo XVIII", dijo a Clarín la presidenta de la Comisión, Teresa Anchorena.

Fuente: Clarín