La estatua de Colón, restaurada y con plaza propia en la Costanera
Tras la mudanza, la escultura recuperó su color original. Se la podrá ver desde un nuevo paseo costero.
Irreconocible. Así luce el monumento a Cristóbal Colón frente al Río de la Plata, en Costanera Norte. Radiante, blanquísimo, imponente.
Los bloques de mármol de Carrara en los que fue esculpido recuperaron el color que distingue a esta piedra única, originaria de Italia. La historia transmitida a través de los años -quizá con algo de épica- ubica al escultor Arnaldo Zocchi en las canteras, eligiendo los bloques que desde allí viajaron en carretas hasta un tren a Roma. Para llegar al estudio del artista, algunos fueron colocados en carros y otros los trasladaron en una suerte de andamiaje de palancas y tablas enjabonadas.
Zocchi tardó diez años en esculpirlo, porque fue interrumpido por la Primera Guerra Mundial. Trabajó primero en su país y luego en Argentina. El monumento llegó aquí en barco, desmantelado.
El arquitecto, restaurador y artista plástico a cargo de la obra, Javier Urani, le explicó a Clarín: "Cada pieza del monumento fue restaurada mientras se encontraba desmantelado. Ya se puede ver que el mármol vuelve a lucir increíble pero aún así tenemos pendiente una limpieza y un tratamiento superficial necesario para que resista el paso del tiempo junto al río".
Fuente: Clarín