Deportes

05/12/2022

Francia tiene una máquina de jugar llamado Mbappé y un goleador de nombre Giroud

Cuando la pelota pasó por el delantero del PSG fue un show. Imposible de detener en velocidad y difícil de cortarle el circuito. El 9 llegó a 52 goles con su Selección.

Es indescifrable Kylian Mbappé. Porque nunca se sabe para dónde va a salir disparado. Es intratable porque por más marca que tenga se las rebusca para trascender. Es imparable porque corre y se lleva todo puesto como un torbellino sin control. 
Y la pregunta es: ¿quién lo frena? Por ahora, nadie tiene la respuesta porque nadie puede con él. En el estadio Al Thumama, el del PSG dio otra dosis concentrada de calidad, resolución y potencia. Un salvaje indomable que cuando las cosas se le ponían feas a Francia, se encargó de aparecer y llevarla de la mano a cuartos de final. 
Con una asistencia y un doblete, Mbappé fue el ícono del triunfo por 3-1 sobre Polonia en el estadio Al Thumama. Con su juego desequilibrante y directo, pero también con la claridad para hacer la pausa exacta, el delantero de 23 años ya es el goleador de Qatar 2022 con cinco goles en cuatro encuentros. Suma nueve gritos en total y dos asistencias en las dos Copas del Mundo que lleva disputadas (11 presentaciones hasta ahora). 
Misma catidad que Lionel Messi (en cinco Mundiales). Más que una tortuga ninja, es un verdadero destructor de redes. 
Pero antes de anotar los suyos, Kylian se encargó de hacer que Olivier Giroud se transformará en el máximo goleador histórico de la selección de Francia. El atacante del Milan recibió una asistencia perfecta del 10 y definió con frialdad para hacer el primero del partido. Ese fue su gol número 52 con la camiseta azul. 
Superó a Thierry Henry (51). 
De sustos y de lucidez estuvo construida la clasificación de Francia. La pasó mal antes de festejar gracias a la magia de Mbappé el campeón del mundo porque su rival lo puso en aprietos. Lejos de la postura ultra defensiva que había presentado ante la Argentina, el conjunto polaco le jugó de igual a igual a los azules. Y estuvieron muy, pero muy cerquita de empezar dando el golpe. 
Una triple salvada debajo del arco fue la jugada que marcó un antes y un después. Una buena combinación por la izquierda provocó la fuga de Przemyslaw Frankowski, que llegó al fondo y metió el centro atrás. 
Con muchos más espacios por la postura más ofensiva de Polonia al verse obligada a buscar el empate, Mbappé hizo lo que quiso. No perdonó en dos contraataques y clavó un par de tiros que fueron cañonazos para el buen arquero Wojciech Szczesny. 
 

Fuente: Clarín

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