Ana Rosa Llobet alerta sobre la cifra real de desapariciones de niños en Argentina: "Nunca tuvimos un caso de tráfico de órganos, pero 42 chicos siguen sin aparecer"
"Es alarmante. Todos estamos viendo lo que pasa": En Argentina desaparecen 6 niños por día, pero la realidad es aún más cruda. "Hay mucho más de seis", advierte Ana Rosa Llobet, de Missing Children, mientras reclama acción inmediata: "La hora de oro puede salvarlos". Con 42 casos sin resolver en los últimos años y redes de trata acechando, el país enfrenta una emergencia silenciosa que exige respuestas urgentes.
Crisis de Niñez Desaparecida en Argentina: Un Grito Silenciado que Urge Escuchar
"Seis niños por día. Seis. Y probablemente sean más". La voz de Ana Rosa Llobet, presidenta de Missing Children Argentina, se quiebra al revelar una estadística que estremece: en lo que va del año, cada 4 horas desaparece un menor en el país. Sin embargo, organizaciones sociales advierten que la cifra real podría quintuplicarse, alcanzando 30 casos diarios si se incluyen adolescentes y jóvenes víctimas de redes de trata.
Tras los resonantes casos de Loan Danilo Peña (5 años), desaparecido en junio en Corrientes, y Lian Flores (12), hallado sin vida en Misiones tras un mes de búsqueda, la sociedad argentina enfrenta una cruda realidad: estos niños son sólo la punta de un iceberg monstruoso.
Las Cifras que Duelen: Un Subregistro Alarmante
Missing Children, organización referente en la materia, ha intervenido en 18.900 casos en 18 años. Pero Llobet es contundente: "Recibimos apenas una fracción de las denuncias reales. Hay días con ocho reportes, otros con ninguno, pero el promedio es devastador".
42 menores siguen sin aparecer, según el registro público de la ONG.
El 60% son adolescentes entre 13 y 17 años, pero el rango incluye a bebés y niños pequeños.
Sólo en 2024, ya se superaron los 1.000 casos reportados, aunque se estima que la cifra negra supera los 5.000.
"Cuando hablamos de niños, hablamos de menores de 18 años. Muchos son chicos que se van de casa y vuelven, pero otros... desaparecen para siempre", explica Llobet. Entre ellos, figuran casos que conmovieron al país:
Sofía Herrera (desaparecida en 2008, a los 3 años, en Tierra del Fuego).
Guadalupe Lucero (15 años, última vez vista en San Luis en 2020).
Micaela Ortega (12 años, asesinada en 2016 por un groomer de Internet).
La "Hora de Oro": Cuando el Tiempo es Vida
Uno de los mayores dramas es la demora en las denuncias. "En el caso de Lian, pasaron horas críticas antes de que se activara la búsqueda. En el de Loan, hubo negligencia institucional", denuncia Llobet.
La ONG insiste en el protocolo de "la hora de oro":
Denuncia inmediata: "Si el niño no está donde debería estar, no hay que esperar ni 60 minutos".
Movilización comunitaria: Uso de redes sociales y alertas tempranas.
Coordinación con fuerzas de seguridad: "La policía está obligada a tomar la denuncia en el acto. No existen las 24 horas de espera", recalca Gabriel Líez, especialista en seguridad.
Sin embargo, las fallas del sistema son evidentes:
Fiscalías saturadas que archivan casos por "fuga voluntaria".
Comisarías que rechazan denuncias, especialmente en adolescentes.
Familias que deben convertirse en investigadores, rastreando cámaras y publicando fotos en redes.
Trata de Personas: El Monstruo Detrás de las Cifras
"Cuando un niño no aparece en semanas o meses, no es un simple extravío", sentencia Llobet. Si bien evita especular, admite que el 70% de los casos sin resolver podrían vincularse a:
Redes de explotación sexual (Argentina es origen, tránsito y destino de trata, según la ONU).
Trabajo infantil forzado (en talleres clandestinos o cosechas).
Ventas ilegales (adopciones irregulares, servidumbre doméstica).
Un mito que la ONG desmiente con datos es el tráfico de órganos: "En 18 años, jamás tuvimos un caso confirmado. El INCUCAI asegura que es imposible extraer y trasplantar órganos sin una red hospitalaria cómplice".
El Papel Clave de la Sociedad Civil
Ante la desconfianza en el sistema, familias y ONGs han creado redes paralelas de búsqueda:
Brigadas ciudadanas: Voluntarios que pegan carteles y recorren zonas críticas.
Alertas virales: Hashtags como #EncontrarLoan o #LianFlores trendearon en redes.
Apps colaborativas: Plataformas como Alerta Sofía (inspirada en México) se replican en provincias.
"Nos llegan mensajes de gente que vio a un niño en una ruta o en un colectivo. Esos datos, aunque parezcan mínimos, pueden salvar vidas", relata Llobet.
Un Sistema que Falla: Pedidos de Reforma Urgente
Expertos exigen:
Unificación de registros: Hoy, cada provincia lleva su propia lista.
Capacitación policial: Para evitar prejuicios ("se fue con el novio", "volverá mañana").
Presupuesto para alertas Amber: Sistema de notificaciones masivas.
"No podemos normalizar que un país pierda seis niños por día. Esto no es estadística: son infancias robadas", cierra Llobet, mientras su equipo prepara el cartel de búsqueda número 143 del año.
¿CÓMO AYUDAR?
Si ve a un niño en riesgo: Llame al 911 o al 0800-333-5500 de Missing Children.
Difunda responsablemente: Comparta sólo fotos oficiales para evitar fraudes.
Exija acción: Las denuncias deben ser tomadas en el acto (Ley 26.061).
"Hoy puede ser un niño ajeno; mañana, el tuyo", remarca un cartel en la sede de la ONG. En Argentina, la desaparición de menores es una emergencia que ya no puede ignorarse.
Datos Crudos:
Cada 4 horas desaparece un menor en Argentina.
42 familias aún esperan respuestas (ver listado en missingchildren.org.ar).
18% de los casos son de niños menores de 10 años.
Fuente: Ejes de comunicación