De receta a venta libre: ¿quién realmente gana con el cambio?: Rubén Sajem habló del impacto de la nueva política de ANMAT
Director del Centro de Profesionales Farmacéuticos, alerta sobre el reciente cambio en la regulación de medicamentos en Argentina. Según Sajem, la decisión de ANMAT de mover ciertos medicamentos de la categoría de receta a la de venta libre podría beneficiar a laboratorios y empresas de medicina prepaga mientras deja a los pacientes enfrentando precios más altos , menos cobertura y ante una expansión descontrolada de la publicidad engañosa.
En una reciente conversación con Radio con vos, Rubén Sajem, Director del Centro de Profesionales Farmacéuticos, abordó un cambio significativo en la regulación de medicamentos en Argentina. La Agencia Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) ha comenzado a reclassificar medicamentos que antes requerían receta médica, moviéndolos al segmento de venta libre, a pedido de los laboratorios.
Sajem explica que este cambio, iniciado en marzo a solicitud del Ministerio de Salud de la Nación, busca ajustar la categoría de ciertos medicamentos que no han mostrado efectos graves reportados en los últimos cinco años. Según Sajem, "esto empezó en el mes de marzo cuando el Ministerio de Salud de la Nación le pide a la ANMAT, que es la agencia que regula los medicamentos, que empiece a considerar pasar a la categoría de venta libre a los medicamentos recetados que no tengan efectos graves que hayan sido reportados en los cinco últimos años".
Entre los primeros afectados se encuentran los omeprazoles, medicamentos populares para problemas gástricos, y recientemente, cinco compuestos farmacológicos adicionales, algunos de uso infantil. Sajem aclara que "hoy estamos en una situación que ya el 30% de los medicamentos que se usan son de venta libre".
El impacto de esta medida en el consumidor es evidente. Los medicamentos que anteriormente estaban cubiertos por obras sociales y prepagas ahora deberán ser adquiridos al precio completo. Esto puede resultar en un aumento significativo del costo para los pacientes, especialmente en el caso de productos esenciales para la salud infantil. Sajem señala que "esto trae como consecuencia que hay muchos medicamentos en que es riesgoso que se usen, tal es el caso de los que se mencionaron, los prazoles, el omeprazol, el isomeprazol".
Sajem aclara las diferencias entre medicamentos de venta libre y aquellos que requieren receta. Los medicamentos de venta libre, como el ibuprofeno y el paracetamol, tienen un perfil de seguridad más controlado y se consideran adecuados para una automedicación responsable. Sin embargo, medicamentos que antes se vendían bajo receta, como los antiulcerosos, requieren un uso más cuidadoso debido a sus potenciales efectos adversos. "Estamos hablando de un ibuprofeno hasta 400 miligramos, de un paracetamol hasta 500 miligramos, de alguna vitamina, de algún producto para dermatología, de algún digestivo".
Uno de los puntos críticos que destaca Sajem es la posible influencia de la publicidad en la automedicación. Los medicamentos de venta libre pueden ser publicitados sin restricciones, lo que puede llevar a la compra basada en información engañosa. Además, la falta de cobertura de las obras sociales y prepagas podría limitar el acceso a estos medicamentos para aquellos que no pueden afrontar el costo completo. Sajem advierte que 'la gente va a terminar pagando más caro, o lo que está pasando, que no los está comprando la gente los medicamentos cuando no tienen cobertura, porque no los puede pagar".
Sajem cuestiona el sentido de esta política desde una perspectiva sanitaria. Argumenta que, aunque se busca reducir la regulación, esto podría beneficiar más a los laboratorios y a las empresas de medicina prepaga que a los consumidores. "Se está beneficiando a los laboratorios, que van a vender más medicamentos sin cualquier lado, con cualquier tipo de publicidad, porque la publicidad no está regulada, y se está beneficiando a las empresas de medicina prepaga y a las empresas financiadoras de la seguridad social".
El cambio en la política de medicamentos refleja una tendencia hacia una menor regulación en el sector, siguiendo la lógica de liberación de mercados promovida por el gobierno. Sin embargo, Sajem advierte sobre los riesgos de esta estrategia y la necesidad de una regulación más equilibrada para proteger a los consumidores. "Lo que hay es una sobreideologización por parte del gobierno, que quiere dejar de regular los medicamentos, dejar de regular los precios de los medicamentos, que se vendan en cualquier lado, que la gente elija qué comprar y no comprar, como si la gente supiera sobre el medicamento".
Fuente: Ejes de Comunicación