Después de 40 años, se reparte la herencia más disputada de la Argentina
La Justicia formalizará la división de bienes de un productor agropecuario, valuados en US$ 225 millones.
Tras 40 años de disputa legal, llega a su fin la pelea por la herencia más codiciada de Argentina. El juez civil de la ciudad de Córdoba Carlos Bustos repartirá mañana las propiedades del millonario Juan Feliciano Manubens Calvet a un grupo de acreedores y familiares. La cotización de los bienes asciende a unos US$ 225 millones.
La información fue confirmada por La Voz del Interior. Pero para llegar al reparto, hay que retrotraerse al comienzo de esta historia de telenovela.
Juan Feliciano nació en Villa Dolores el 20 de octubre de 1904. Dicen que decidió ser rico a los 14 años. Se sabe que con dinero de su familia se lanzó a la compra de tierras. No mucho más allá de sus 25 años era ya "un fuerte productor agropecuario de la ciudad de Villa Dolores", como es posible leer en un diario local de la época. Pero no le bastó ser millonario. Intentó el camino de la política: diputado provincial y dos veces intendente de su ciudad. Ya en la mitad de su vida era el dueño de una de las mayores fortunas de América Latina.
Vivió sus últimos días encadenado a la cama, acusado de reducir al estado de servidumbre a los peones de su estancia Pinas, en Cruz del Eje, en Córdoba. Se dice que era estéril. Pero desde que murió, el 5 de marzo de 1981, aparecieron supuestos hijos que reclamaban ser los únicos herederos de su enorme fortuna. Uno de los más conocidos es Manuel Maidana, un correntino que presentó un DNI con el apellido Manubens Calvet. Sin embargo, fue denunciado por falsificación de documento y condenado a tres años de prisión. Pocos años después, otro juez revirtió la sentencia y reconoció su identidad, en un trámite que tardó 18 años.
El documento en cuestión, sobre el que plantean la duda de legitimidad, sería un acta en la que Juan Feliciano Manubens Calvet reconoce ante un Juez de Paz de La Lomita de Lafinur, provincia de San Luis, que Manuel Antonio Maidana (hoy Manubens Calvet) es hijo suyo, extramatrimonial, con Julia Maidana.
Manuel no fue el único en proclamarse hijo del terrateniente. En el 81, una mujer paraguaya llamada Dolores aseguró ser la única hija de Manubens Calvet. Llegó a Argentina con varios representantes. El desenlace: fueron acusados de estafa y terminaron presos.
Hasta hace poco, según el Tribunal que lleva la causa, había casi 60 familiares o pseudofamiliares de Manubens Calvet, de cinco provincias, proclamando su derecho a cobrar la herencia.
Según pudo reconstruir La Voz en base a la tasación hecha en 2017 y a los distintos involucrados en la causa judicial, finalmente la herencia se dividió en tres partes. En su gran mayoría, los bienes son propiedades rurales y urbanas y el 40% del patrimonio se destinó para pagar los costos y gastos acumulados a lo largo de cuatro décadas de litigio.
La segunda parte, aproximadamente el 35% del patrimonio, es finalmente lo único que les quedará a los herederos familiares más conocidos.
Se trata de los descendientes de las cinco ramas familiares correspondientes a los cinco hermanos que tuvo Manubens Calvet.
Son aproximadamente US$ 79 millones, que se repartirán entre los cinco grupos integrados por descienden de aquellos cinco hermanos.
Un 28,6% del total de los derechos sucesorios de estos parientes fue comprado por un grupo de misteriosas empresas offshore.
Pero hay nombres propios identificados y ganadores en esta larga disputa. El primero es el correntino Manuel Manubens Calvet (ex-Maidana), quien terminó negociando una cifra gigantesca (se habla de unos US$ 5 millones).
También recibirá una porción del dinero (casi US$ 6 millones) la familia heredera de Margarita Woodhouse, la pareja de Manubens Calvet durante años, con la cual el terrateniente nunca se casó.
Los herederos del abogado y juez porteño José Raúl Whittingslow recibirán un 15%. Se trata de un acuerdo que se hizo en los ?80, luego de que el letrado descubriera la estafa de la mujer nacida en Paraguay.
Fuente: Clarín
