La ropa argentina es la segunda más cara del mundo y la carne y el vino, lo más barato
Así surge de un semáforo de precios que compara lo que se paga en 100 países. Los impuestos y el dólar "atrasado" entre los motivos. ¿Qué pasa en el caso de los servicios?
La polémica por el precio de las empanadas encendió el debate sobre si la Argentina está cara o barata en dólares. Un informe privado compara -en un ranking del 1 a 100- los valores de bienes y servicios locales versus los de otros 99 países.
En el semáforo de los precios, la Argentina figura con la indumentaria más cara en la zona roja, con diferencias del 100% versus otros países, y con la carne y el vino, entre lo más económico.
Un informe del Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (Ieral) de la Fundación Mediterránea hizo una radiografía de la posición de la Argentina en el mapa de precios internacionales.
El relevamiento comparó una canasta de 30 productos entre artículos de consumo masivo, bienes durables y servicios con los precios de otros 99 países tomados de la plataforma Numbeo, revelando una economía con marcadas diferencias entre sectores.
En ese sentido, la Argentina presenta una estructura de precios heterogénea.
Mientras que los alimentos y servicios públicos ofrecen precios más competitivos en dólares, otros, como la ropa y la electrónica tienen precios más altos.
Esta dualidad refleja las complejidades de las distintas industrias y la necesidad de políticas que fomenten la competitividad y la eficiencia, explicó Ieral.
El Instituto atribuye las diferencias a factores como el encarecimiento de los productos en dólares por la apreciación del peso argentino y el dólar estable, sumado a impuestos internos y restricciones todavía a las importaciones.
"Juega un poco el dólar barato que ahora fluctúa y mucho el alto nivel de impuestos con una alta protección a bienes como los durables", señaló Marcelo Capello, responsable de la sección Fiscal de Ieral.
"La Argentina exhibe una paridad cambiaria relativamente baja, aún tras la flexibilización del cepo cambiario, tratándose de una situación que probablemente continúe a largo plazo. Una moneda apreciada tiende a generar elevados costos locales en dólares, especialmente en bienes que no entran en el comercio exterior (no transables), así como los altos tributos al comercio exterior e impuestos internos y restricciones cuantitativa derivan en elevados precios locales para algunos bienes", agregó.
La ropa y bienes durables como la electrónica son notablemente más caros en Argentina. Un vestido de una marca como Zara, unos jeans Levis y unas zapatillas deportivas cuestan entre 60% y 100% más que en otros países, mientras que un celular sale hasta 70% más.
Le siguen una botella de litro y medio de agua mineral y el pan blanco.
En tanto, servicios públicos como el transporte y los básicos del hogar (electricidad, gas, agua) son más baratos comparado con otros países. Por ejemplo, el costo del boleto de transporte público representa alrededor del 20% de lo que sale en promedio en el resto de los mercados analizados.
En alimentos, la Argentina también muestra precios relativamente bajos. La carne vacuna, por ejemplo, cuesta alrededor de la mitad de lo que sale en otros países.
El pan, la leche, los huevos y las manzanas tienen precios que equivalen entre un 60% y un 80% del valor promedio del resto de los países, aunque con diferencias regionales.
En la comparación con mercados vecinos, los alimentos en la Argentina están más baratos que en Chile y Uruguay, pero más caros que en Brasil. La canasta evaluada, integrada por 11 productos, ronda los US$ 36,4 en la Argentina, mientras que en Chile y Uruguay alcanza US$ 45 y US$ 44, respectivamente, y en Brasil cuesta US$ 29.
En relación con los productos más baratos, se destacan principalmente el vino (Argentina se ubica en la posición 90° en el ranking de los más caros), como también la cuota mensual de gimnasio (79°).
Fuente: Clarín
