La UBA declaró la emergencia salarial y renace el conflicto
Es porque el Gobierno no volvió a convocar a la paritaria. Los gremios piden una suba del 40% y amenazan con no arrancar el segundo cuatrimestre.
La Universidad de Buenos Aires (UBA) declaró ayer la "emergencia salarial para docentes y no docentes" y el conflicto entre las universidades y el Gobierno nacional volvió a recalentarse. Fuentes sindicales le dijeron a Clarín que analizan no iniciar el segundo cuatrimestre, en el caso de no haber novedades con respecto a sus demandas.
El Consejo Superior de la UBA tomó la determinación de declarar la emergencia salarial tras la interrupción de las negociaciones entre el Gobierno y los gremios del sector (docentes y no docentes), quienes reclaman una recomposición salarial del 40 por ciento por lo perdido en poder adquisitivo durante este año.
La última reunión paritaria había sido el 28 de mayo (hace un mes y medio), y desde entonces el Gobierno no volvió a convocar a los gremios.
En aquella ocasión -la primera y última en la que participó la ministra de Capital Humano Sandra Pettovello- desde ese Ministerio habían quedado en dar una respuesta ante el reclamo de los trabajadores universitarios.
Pero la respuesta nunca llegó. Según pudo saber Clarín, fue porque desde el Ministerio de Economía dijeron que no. Desde entonces, y sin convocar a paritaria, el Gobierno solo dio un aumento del 4% a través de una resolución.
Frente a esta situación, la UBA salió a apoyar a los trabajadores universitarios y a presionar fuerte con la declaración de la emergencia salarial.
"Ante una pérdida del poder adquisitivo de los salarios del 40 por ciento durante el primer semestre de este año y la falta de acuerdo en las negociaciones paritarias con el gobierno, el Consejo Superior de la UBA se reunió hoy (por este miércoles) y declaró por unanimidad de sus miembros la emergencia en materia salarial en esta institución", informaron desde la UBA.
Una medida similar (en aquel momento, la declaración de la emergencia presupuestaria) había anticipado el conflicto con el Gobierno de principios de año, que derivó en la multitudinaria marcha del pasado 23 de abril.
La declaración de la UBA se produce una semana después que el resto de los rectores de universidades públicas, agrupados en el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) emitieran un comunicado en el que volvieron a reclamar la "urgente recomposición salarial para las y los trabajadoras y trabajadores docentes y no docentes del sistema universitario público nacional, la reactivación de los programas y de los dispositivos de asistencia estudiantil y la actualización del monto asignado para las becas".
"La pérdida de poder adquisitivo de los salarios docentes nacionales impacta en la calidad educativa. Los profesores son trabajadores calificados que pueden irse a otras actividades. Los sueldos de los profesionales de la salud de los hospitales universitarios, por ejemplo, están atados a los de los no docentes", explicó a Clarín Emiliano Cagnacci, secretario general de ADUBA, el gremio de los docentes universitarios de la UBA.
Cagnacci aseguró a este diario que, de no obtener respuestas, "seguramente alguna medida de fuerza va a haber. Una posibilidad es no iniciar el segundo cuatrimestre, una medida que estamos analizando junto a los estudiantes de la FUBA (la federación de centros de estudiantes de la UBA)".
Fuente: Clarín
