Turismo a pique: se registró una caída del 16,6% en junio.
Pese a la expectativa que generaron los dos fines de semana largos en un plazo de sólo ocho días, los resultados no acompañaron. La cantidad de turistas que se trasladaron en los feriados de junio cayó frente al registro de los últimos años.
Los feriados por el Día de la Bandera y el Paso a la Inmortalidad de Martín Miguel de Güemes movilizaron a más de 2 millones de turistas en todo el país, que gastaron en conjunto $412.372 millones, según un relevamiento del sector. Sin embargo, no alcanzó para revertir la tendencia a la baja que atraviesa el rubro y hubo una caída interanual del 16,6% en cantidad de personas.
Pese a la expectativa que generaron los dos fines de semana largos en un plazo de sólo ocho días, los resultados no acompañaron. El informe arrojó que 721.000 turistas viajaron durante el feriado por Güemes y 1,4 millones por el Día de la Bandera, para totalizar 2.162.750 viajeros.
La cantidad de turistas que se trasladaron en los feriados de junio cayó frente al registro de los últimos dos años para la misma fecha, ya que en 2024 habían viajado 2.592.000 personas a lo largo de 7 días y en 2023 lo hicieron 2.247.966 en un lapso de 4 días. Es decir que la cantidad de gente que viajó durante seis días fue un 16,6% menor a los mismos fines de semana del año pasado, que tuvieron un día más.
Además, los viajes se volvieron más austeros y las estadías más cortas, según arrojó el relevamiento. Uno de los principales factores de ajuste fue la duración de las estadías: este año promediaron 2,2 noches frente a las 2,9 de 2024.
También se redujeron los gastos en recreación y compras. El reporte de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) precisó que, en promedio, cada turista gastó $82.900 diarios en alimentos, bebidas, alojamiento, transporte, recreación y compras diversas. Este año, el gasto total resultó un 27,9% menor a precios reales que en 2024.
Al respecto, desde la entidad consideraron que "esto refleja un turista más austero" que redujo gastos en "servicios recreativos y en compras comerciales", así como en las estadías. La merma se debe "al contexto económico" que "limitó el consumo en varios destinos", señalaron.
No obstante, "hubo una buena respuesta del turismo de cercanía, picos de ocupación en ciudades con eventos masivos y reconexión con paisajes, sabores e identidades locales", destacaron.
En el primer semestre de 2025 ya se registraron cinco fines de semana largos, con un total de 8,8 millones de turistas que gastaron unos $2.103.791 millones. Las escapadas beneficiaron particularmente a las economías regionales y mantuvieron el flujo turístico en temporada baja. Los feriados de junio tuvieron "un efecto dinamizador sobre las economías regionales", aseguró la CAME, señalando que los turistas ayudaron a "miles de pequeñas y medianas empresas vinculadas directa o indirectamente".
En este sentido, remarcaron que "aunque en comparación interanual se observa un ajuste en el nivel de gasto y en la duración promedio de las estadías", los viajeros siguen mostrando "una fuerte adhesión al turismo interno como opción de descanso y recreación".
Fuente: Crónica
