Detienen a espía ruso en Francia antes de los Juegos Olímpicos

Un chef ruso con vínculos con el FSB fue arrestado en París acusado de planear actos de desestabilización durante los Juegos Olímpicos. La detención se produce a días del evento y en medio de un gran operativo de seguridad. Francia refuerza medidas ante posibles amenazas de injerencia extranjera.

En Francia, la policía ha arrestado a un presunto espía ruso acusado de planear actos de "desestabilización a gran escala" durante los Juegos Olímpicos, que comienzan en pocos días. El detenido es un chef de 40 años que vivía en París y que, según la fiscalía, tiene vínculos con el Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB). La detención ocurrió tras un allanamiento en su domicilio, donde se encontraron pruebas que sugieren su intención de causar perturbaciones durante el evento.

El chef, identificado con la inicial "K" por el diario Le Monde, está en prisión preventiva mientras se desarrolla una investigación judicial en su contra. La investigación ha revelado que el sospechoso discutió con un contacto ruso sobre una "ceremonia de apertura como nunca antes" en los Juegos Olímpicos. El delito que enfrenta es compartir "inteligencia con una potencia extranjera" con el objetivo de provocar hostilidades en Francia, que puede ser castigado con hasta 30 años de prisión.

"K" lleva 14 años residiendo en Francia y ha trabajado en restaurantes de alta gama en París y Courchevel. Además, ha participado en programas de cocina y publicado tutoriales en redes sociales. Antes de mudarse a Francia, trabajó en el sector financiero en Moscú y fue socio de un fondo de inversión.

El ministro francés del Interior, Gérald Darmanin, ha confirmado que la sospecha es que el individuo podría estar implicado en intentos de desestabilización que no necesariamente serían de naturaleza terrorista. La relación entre Francia y Rusia se ha tensado debido a la postura crítica de Francia hacia la invasión rusa de Ucrania y el apoyo del presidente Emmanuel Macron al gobierno de Kiev.

En respuesta a la amenaza, Francia ha desplegado el mayor operativo de seguridad de su historia para los Juegos Olímpicos, que incluyen una ceremonia inaugural compleja y de alto perfil. Además, 880 personas han sido excluidas del evento por sospechas de injerencia extranjera. Los recientes incidentes, incluyendo la detención de un ciudadano ucraniano-ruso y un investigador francés en Rusia, reflejan el creciente clima de tensión entre Rusia y Occidente.

Fuente: La Nación