Detuvieron a un japonés por llamar 24 mil veces para quejarse por un mal servicio
Akitoshi Okamoto, un jubilado de 71 años, estaba disconforme con la compañía de telefonía KDDI y por la insólita cantidad de llamados se lo detuvo por "obstrucción fraudulenta de los negocios"
Akitoshi Okamoto, un jubilado de 71 años de Japón, llamó 24 mil veces para quejarse por el mal servicio de la compañía KDDI y lo detuvieron por el delito de "obstrucción fraudulenta de los negocios". El caso se volvió viral en las redes y lo denominaron el "vengador de los call center".
Gabriel Michi, periodista de internacionales, informó en C5N los detalles del insólito caso que dio la vuelta al mundo, que generó sentimiento de justicia en muchos al punto de considerarlo héroe, aunque para la compañía es un delincuente.
El hombre realizaba los llamados a una línea gratuita y, si bien el promedio es de 33 veces por día, tuvo picos de 400 por semana, como sucedió en agosto, cuando la empresa finalmente decidió denunciarlo. Los contactos algunas ocasiones los hacía desde un teléfono propio pero otras desde uno público porque ya le reconocían el número.
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El reclamo de Okamoto era porque no funcionaba el servicio para conectar con radios el celular y desde la compañía nunca atendieron su problema. La figura de obstrucción fraudulenta de los negocios contempla que la empresa, por culpa del jubilado que llamaba constantemente no pudo generar otros negocios. Según declaró un portavoz de la policía, el japonés exigía "que el personal de KDDI le pidiera disculpas por violar su contrato"
Además, en contra el hombre argumentan que los empleados que lo atendían sufrían de malos tratos e insultos de su parte, lo cual también incidirá en el juicio.
Según informó Michi, en Japón hay "un problema serio" con las empresas de tecnología y las personas mayores, debido al gran envejecimiento poblacional y el rápido desarrollo tecnológico que deja afuera a los adultos de la tercera edad.
