Un hijo de Bolsonaro busca privatizar las playas en Brasil
La idea suscitó un sonoro rechazo entre ambientalistas y la opinión pública
Una propuesta de enmienda constitucional, propuesta por el senador Flavio Bolsonaro, hijo del ex presidente, podría hacer que las famosas playas de Brasil caigan en manos privadas. La idea suscitó un sonoro rechazo entre ambientalistas y la opinión pública, en un país que se enorgullece de tener acceso abierto a sus vastas costas.
Brasil tiene una de las franjas litorales más largas del mundo, con alrededor de 7.500 kilómetros, que son de propiedad estatal y gestionadas por el gobierno. Pero en el Congreso avanza el proyecto del senador, cuyo padre nunca ocultó su sueño de crear un "Cancún brasileño", en referencia al conocido destino turístico mexicano con grandes complejos hoteleros.
La propuesta de enmienda constitucional busca transferir la propiedad de tierras costeras a estados, municipios y grupos privados.
Sus detractores afirman que ello repercutiría negativamente en la protección del paisaje y el medio ambiente, además de impedir que la población acceda libremente a las playas.
Una audiencia pública en el Senado el lunes último provocó indignación en las redes sociales.
"Presionemos a los senadores para que voten en contra"de esta propuesta, dijo la actriz y activista ambiental brasileña Laila Zaid en un video de Instagram, visto casi un millón de veces.
Leticia Camargo, que coordina un grupo de trabajo sobre conservación marina en el Congreso, dijo a la AFP que la propuesta podría dejar el camino libre a una "fuerte presión de intereses inmobiliarios".
Además podría conducir a "una mayor ocupación de tierras marinas, en un momento en que el cambio climático hará cada vez más frecuentes las tormentas y la erosión costera". Las preocupaciones van más allá de lo ambiental: "Meterse con algo tan importante de la cultura brasileña, como es nuestro acceso y nuestro uso de la playa, es un asunto serio".
La ley brasileña, que declara las playas bienes públicos, impide los masivos resorts, casinos y playas privadas que existen en otros países.
La propuesta ya obtuvo luz verde en la Cámara de Diputados y Camargo estima que podría ser aprobada por la comisión de Constitución y Justicia del Senado, donde la oposición de derecha tiene mayoría.
Luego pasará al Senado.
Camargo, sin embargo, confía en que la presión ciudadana pueda detener la enmienda, que despierta recelos en toda la franja costera. Según medios locales, el presidente del Senado, Rodrigo Pacheco, no planea por el momento incluir el asunto en la agenda para votación.
Flavio Bolsonaro calificó de "noticia falsa" la información según la cual la enmienda busca "privatizar las playas". Según él, concierne solo a "zonas ya ocupadas". Para Daniel Capecchi, profesor de derecho constitucional en la Universidad de Río de Janeiro, el proyecto tiene una "posibilidad considerable" de ser aprobado.
Sin embargo, dijo que si los estudios demuestran que el cambio tendrá un "impacto ambiental severo", podría ser impugnado ante los tribunales, según lo dictado por la Constitución.
Fuente: Clarín