Creció un 50% la demanda de cajas de seguridad no bancarias

El servicio de los principales referentes del mercado vuelve a registrar mucho interés a días de las PASO. Con bóvedas llenas, abren nuevas sucursales y amplían las existentes

La inestabilidad macro a días de las PASO disparó la demanda de cajas de seguridad no bancarias, una alternativa que crece ante la incertidumbre y se afianzó desde la cuarentena. A la antesala electoral, se suma la menor oferta de bancos -con cierre de sucursales y bóvedas llenas-, lo que impulsa a las empresas del sector a afianzarse en el negocio del resguardo de valores.

Ante el mayor interés en el servicio -con picos de hasta el 50% en los últimos días-, las compañías se expanden con nuevas sedes robotizadas y amplían las que tienen en funcionamiento, mientras lidian con el cepo para traer equipamiento del exterior: bóvedas, cámaras y sistemas biométricos que se importan de Europa, mayormente de Suecia y Alemania.

Se calcula que en el país hay más de 800.000 cajas de seguridad, entre bancos y empresas particulares.

El año pasado, la empresa -pionera en la industria desde su fundación en 2014- se instaló en Avenida Santa Fe y Callao, y desembarcó en los shoppings, en Alto Palermo y Unicenter. En menos de un año, esta última ya está completando su ampliación.

"La demanda acompaña el crecimiento sostenido de la compañía. Estamos recibiendo a muchos clientes. La ocupación es alta e invertimos para agrandarnos.

El consumidor que busca una caja de seguridad privada en tiempos electorales es un comportamiento que ya vimos en las PASO de 2019. Ahora, se agrega el cierre de sucursales de bancos por la transformación digital que atraviesa la industria y el descontento con el servicio", analizó Carlos Gesino, CEO de Hausler.

Fuente: El Cronista Comercial