El dólar blue se recalentó en lo que va del año: ya es la cotización paralela más cara
Por la incertidumbre que provoca mayor demanda, la divisa trepó $ 3,50 en los primeros 15 días del año
De todas las cotizaciones paralelas que existen del dólar en la Argentina, la del blue se convirtió en estos días en la más cara. El billete estadounidense que se consigue en el mercado informal trepó $3,5 desde el primer lunes del año y quedó a un paso de su récord histórico de $210. Así, la brecha con el dólar mayorista ya es casi del 98%. Los analistas ven un verano con más tensiones, tanto en el segmento oficial como en el paralelo.
El dólar informal arrancó el año con subas y bajas, pero siempre entre los $203 y los $209. El viernes pasado, cerró a $209,5, por encima de las cotizaciones financieras. En total, desde el último día de 2021 el blue subió 0,7%, un alza menor de las que experimentaron tanto el contado con liquidación como el dólar MEP en la primera quincena del año. Pero aún así, la cotización en la calle es más elevada. Es que los dólares que se consiguen en la bolsa "se despertaron" en los últimos días, tras haber retrocedido algunos escalones en las primeras ruedas del año. El contado con liquidación "libre", que se consigue mediante la operatoria con el bono Global 2030 en dólares, aumentó 3,1% en lo que va del mes, para cerrar el viernes a $209,38. Por detrás, el CCL "de pantalla" sube 1,9% en enero y cerró el viernes a $206,64.
Estos incrementos contrastan con el ritmo de devaluación diaria que ha convalidado el Banco Central en el segmento oficial en las últimas dos semanas. El viernes, el tipo de cambio mayorista terminó a $103,84, lo que implica un ajuste semanal de 56 centavos. Así, en lo que va de 2022, el tipo de cambio sube menos de 1%, muy por debajo de la inflación que proyectan las consultoras para el primer mes del año. El economista Walter Morales, explicó: "La estrategia cambiaria definida por el equipo económico después de las elecciones y en el marco de las negociaciones con el FMI dio lugar a un alza del ritmo de depreciación, que durante buena parte de 2021 había permanecido planchado en torno al 1% mensual para evitar sumarle más presión a una muy elevada inflación". Amplió: "El objetivo formulado por el BCRA para 2022 es mantener estable el tipo de cambio real. En diciembre y en lo que va de enero, la velocidad de avance del dólar oficial subió algunos escalones. Sin embargo, con un ojo puesto en no recalentar aún más el costo de vida en momentos de alza, mantiene la suba del dólar mayorista por debajo de la dinámica inflacionaria", añadió.
En el mercado creen que frente a la escacez de divisas y a una demanda persistente, durante el verano habrá más presiones cambiarias y que al Banco Central no le quedará más remedio que convalidar una suba más rápida del dólar mayorista, para acercarla al ritmo proyectado de inflación mensual.
Analistas de la consultora Delphos apuntaron que si bien el organismo que preside Miguel Pesce dio una señal positiva al ajustar al alza sus tasas de interés, la medida no tuvo "la magnitud necesaria para acercarse a los objetivos de moderar la apreciación del tipo de cambio oficial ni proveer tasas de interés reales a los depósitos".
Por eso, anticiparon: "Descontamos que este ritmo de depreciación del tipo de cambio se ajustará "sin prisa pero sin pausa" a lo largo del verano hacia niveles del 3% mensual".
En esta misma línea, el economista Hernán Hirsch sostuvo: "Es probable que el BCRA termine entrampado producto de una inflación que no cede y no deja espacio para recomponer competitividad cambiaria".
"El corto plazo va a estar dominado por la incertidumbre que van a seguir generando las negociaciones con el FMI, la debilidad que suele mostrar la demanda de pesos en este período del año y alguna revisión a la baja sobre las perspectivas de la economía argentina por la seca. Veo una dinámica cambiaria compleja e inestable", dijo Hirsch. El bimestre seco. Miguel Pesce, titular del Banco Central. En enero y febrero casi no hay oferta de dólares
Fuente: Clarín