El próximo "unicornio" argentino: Satellogic ya vale US$ 850 millones
La startup que fabrica nanosatélites se asoció con un fondo para salir a cotizar en Wall Street. Su historia.
La compañía aeroespacial argentina Satellogic se calza el traje de unicornio.
La tecnológica fundada por Emiliano Kargieman y Gerardo Richarte en 2010, acaba de ser valuada en US$ 850 millones y se prepara para cotizar en el Nasdaq. A la fecha, logró lanzar 17 nanosatélites de bajo costo y el objetivo es el armado de una constelación de 300 satélites, todos de manufactura propia, no más allá de 2025.
La gran novedad es que la startup enfocada en el negocio de la venta de imágenes satelitales logró recaudar US$ 100 millones en inversiones de varios fondos, entre ellos Cantor Fitzgerald y Softbank, lo que le permitirá continuar con el plan para tener una cobertura satelital de la Tierra, recabar datos e imágenes en tiempo real y ofrecerlas como un ser- vicio. Todos fundamentos para captar capitales frescos, lo cual explica el interés en figurar en el principal panel de la Bolsa de Nueva York.
A la fecha, la compañía ya llevaba recaudados US$ 120 millones, pero hora está a punto de ingresar al club de los unicornios, tal como se conocen a las empresas valuadas en más de US$ 1.000 millones. Esa es la marca que ya cruzaron Mercado Libre, Globant, OLX, Despegar y Auth0. Satellogic lanzó su primer microsatélite al espacio en 2013, bautizado como "Capitán Beto", y comenzó a orbitar el 26 de abril. Luego vinieron otros: "Manolito", "Tita", "Fresco", "Batata" y "Milanesat". Tienen aspecto de un secarropas: pesan 38,5 kilos y miden 82 centímetros.
A principios de año anunciaron un acuerdo con Space X, la empresa aeroespacial del fundador de Tesla, Elon Musk, para incrementar el ritmo de lanzamientos de los microsatélites.
La semana pasada, lanzaron al espacio los primeros 4 a bordo del cohete Falcon 9 desde Cabo Cañaveral, Estados Unidos, que se sumaron a los 13 que ya estaban en órbita.
"Con muchos más lanzamientos en el horizonte, continuaremos haciendo crecer nuestra flota a un ritmo agresivo, que coincida con la creciente demanda global de información geoespacial", dijo Kargieman.
Ese es el corazón del negocio de Satellogic: proveer imágenes muy nítidas de toda la superficie terrestre en tiempo real, un insumo clave para gobiernos, agencias gubernamentales, espaciales y de agricultura. La estrategia es competir con tecnología de punta con tarifas bajas.
La empresa tiene hoy 200 empleados de alta calificación, con oficinas en la Argentina (Buenos Aires y Córdoba), Estados Unidos (Charlotte y Miami), España (Barcelona), Israel (Tel Aviv), China (Beijing) y Uruguay (Montevideo). En sus inicios, Kargieman (matemático) y Richarte (experto en informática), comenzaron a diseñar los nanosatélites con la ayuda del INVAP. Hoy se posicionan como uno de los grandes proveedores privados de información geográfica en vivo. La compañía tiene la capacidad de recolectar y compactar el relieve de más de 4 millones de kilómetros cuadrados por día.
De 46 años, Kargieman ganó cierta fama como emprendedor: cofundó en los 90 Core Securities, una startup enfocada en la seguridad informática, vendida pocos años después.
Parte de ese dinero le permitió ingresar a un programa de la NASA, que lo introdujo en los negocios aeroespaciales y desde el cual proyectó Satellogic.
"El New Space es una industria que crece gracias al sector privado", proclama. En lo inmediato y con los números de la compañía "bastante equilibradas", trata de escalar como un jugador relevante en el análisis geoespacial.
Fuente: Clarín