Negocios y economía

05/01/2023

Las distribuidoras de gas piden un aumento de $ 1.500 desde febrero

La boleta promedio se iría a más de $ 4.000 tras quitar subsidios y recomponer tarifas a las empresas gasíferas.

Las distribuidoras de gas reclamaron una suba del 190% en el servicio que prestan, cuyo impacto final en los hogares sería de $ 1.500 mensuales. 
La recomposición fue expuesta por las empresas (Metrogas, Naturgy, Camuzzi, Gasnor, Litoral Gas) en una audiencia pública. 
Las compañías proponen ese ajuste como "tarifa de transición", es decir hasta que haya una revisión integral de tarifas más completa, que deje todo el marco legal ordenado. Además de esa recomposición inmediata, que regiría desde el 1 de febrero hasta el 30 de abril, después solicitaron ajustes trimestrales equivalentes a la variación del IPC en ese período. 
El ente regulador (Enargas) escucha las propuestas, las evalúa y saca sus propias decisiones. Hasta ahora, hubo sólo dos aumentos autorizados a las empresas distribuidoras de gas, uno en cada año (junio de 2021 y marzo de 2022). Desde septiembre, las boletas se fueron incrementando pero por otra razón: la quita de subsidios al costo del gas en si mismo. 
En el Gobierno tienen que determinar cuánto pagarán los clientes por el gas que consumen -ya hubo otra audiencia pública al respecto- y el margen que obtendrán las distribui doras por prestar ese servicio. La administración de Alberto Fernández suspendió las revisiones integrales de tarifas (RTI) cuando arrancó su mandato. Desde allí, generó esquemas de "transición". Las empresas avisaron la recomposición 2023 también será de "transición", que el aumento reclamado ahora no los hará desistir de futuros pleitos legales por incumplimientos del contrato de concesión, puntualmente de las revisiones de tarifas. 
?Desde diciembre de 2019 que el IPC acumulado aumentó un 281%, mientras que el margen de distribución subió un 80% en ese período?, puntualizó Daniel Martini, director ejecutivo de la Asociación de Distribuidoras de gas (Adigas), que agrupa a todas las empresas. 
"El margen de distribución, es decir, el porcentaje de los ingresos de una factura que se queda la empresa distribuidora, está en un mínimo histórico de los últimos 30 años", observó Martini. "En diciembre de 2019, los productores de gas se quedaban con un 41% de los ingresos de una factura, mientras que los distribuidoras captaban un 24%. En enero de 2023, el 57% de lo que pagan las boletas va para el gas, y solo un 12% para las distribuidoras", ejemplificó. 
En sus alocuciones, los directivos de Metrogas, Naturgy, Camuzzi y otras remarcaron que sus costos (salarios, cables, equipos, maquinarias) subieron al ritmo de la inflación -casi 300%-, mientras que sus ingresos avanzaron un 80%. 
El mayor precio por el gas que pagan los consumidores no se lo quedan las distribuidoras. Estas firmas cobran lo que pagan los clientes y le traspasan la parte que les toca -que está reglada- a los productores de gas. 
El Gobierno desistió de la idea de ordenar las tarifas de luz y gas hasta el final de su mandato. Si seguirá con la quita de subsidios (a través de la segmentación). 
El Poder Ejecutivo busca aminorar las erogaciones públicas tanto para las boletas de luz como de gas. En diciembre, la secretaría de Energía presentó cuatro propuestas en esa dirección: un aumento en el costo del gas que pagan los hogares, cuyo impacto en las boletas va del 21% al 54%. 
 

Fuente: Clarín

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