Massalin Particulares suspendió un plan de inversiones de u$s 300 millones
El proyecto incluía la ampliación de la planta de Merlo y generaría exportaciones por u$s 100 millones anuales. Su calentador de tabaco, Iqos, es la gran apuesta global de Philip Morris International
Massalin Particulares puso en suspenso una inversión de u$s 300 millones para introducir en el mercado argentino productos alternativos al cigarrillo. La tabacalera tomó la decisión luego que el Ministerio de Salud, prohibió la comercialización de productos con tabaco calentado en el país.
La filial en la Argentina de Philips Morris Internacional (PMI) sostuvo, a través de un comunicado, que frenó un desembolso millonario que incluía una ampliación en su planta en Merlo, provincia de Buenos Aires. Además, aseguró que la inversión "hubiese dado la posibilidad de realizar exportaciones por más de u$s 100 millones anuales".
A través de una resolución publicada en el Boletín Oficial, el pasado lunes, el Ministerio de Salud prohibió "la importación, distribución, comercialización, la publicidad y cualquier modalidad de promoción y patrocinio en todo el territorio argentino de los sistemas o dispositivos electrónicos destinados a inhalar vapores o aerosoles de tabaco, denominados habitualmente como Productos de Tabaco Calentado".
De esta forma, el Gobierno apuntó a PMI, que avanza en el mundo con el Iqos, su marca insignia, que busca suplantar a los tradicionales cigarrillos Marlboro. Este dispositivo, que calienta tabaco en lugar de quemarlo, no llegó a la Argentina pero, hasta ahora, no contaba con ninguna restricción legal para ser comercializarlo.
Massalin todavía no lo traía al país por limitantes económicos, como el cepo a la importación.
"Más allá del impacto en el proyecto de inversión, la decisión coarta la posibilidad de brindarles a los 7 millones de fumadores adultos que hay en el país alternativas diferentes al cigarrillo", resaltó el comunicado que envió este martes la dueña de las marcas Marlboro, Parliament, Chesterfield, L&M y Philip Morris.
"Se trata de una resolución que aísla a la Argentina de los avances que hay en el mundo en este sector", agregaron desde Massalin, que cuenta con el 60% del mercado de cigarrillos en el país.
Para Massalin, "la decisión del Ministerio de Salud va en detrimento de la inversión, la ciencia y la tecnología. La Argentina tenía la posibilidad de ser considerada para una inversión de más de u$s 300 millones, y crear cientos de puestos de trabajo registrado, en blanco y de calidad. Sin embargo, este tipo de iniciativas aisladas y no fundamentadas en la ciencia y los datos continúan deteriorando tanto la inversión genuina privada y directa como la posición estratégica de Argentina como plaza para hacer negocios", respondieron.
PMI comercializa el Iqos, un dispositivo libre de humo, en más de 70 mercados. Hasta ahora, su llegada a la Argentina no había avanzado por las trabas a las importaciones y los altos costos impositivos.
"Los productos de tabaco calentado y sus dispositivos para calentarlos representan una alternativa para las más de 1000 millones de personas adultas que fuman alrededor del mundo", remarcaron desde Massalin.
En 2011, el Gobierno nacional, a través de la Administración Nacional de Medicamentos y Tecnología Médica (Anmat), ya había prohibido la importación, distribución, comercialización en el país del "Cigarrillo Electrónico".
"De acuerdo a investigaciones independientes, los productos de Tabaco Calentados producen aerosoles con nicotina y otras sustancias químicas como el acetaldehído, la acroleína y el formaldehido, las cuales son dañinas y potencialmente dañinas para la salud", explicó la cartera de Salud, a través de la resolución publicada el pasado lunes.
Fuente: El Cronista Comercial