Musimundo: Carsa logró acuerdo con bancos para reestructurar sus deudas
Tiene un pasivo bancario de $1.748 millones en situación crítica. Además de otras obligaciones financieras y comerciales pendientes de normalización.
Carsa es una de las dos licenciatarias de Musimundo (la otra es Electrónica Megatone, EMSA). Viene arrastrando problemas económicos y financieros desde 2017. Ese declive se reflejó en la desaparición de la marca en varios puntos emblemáticos del país, por el cierre de medio centenar de locales. Ahora, la empresa con sede en Resistencia, Chaco, suma un nuevo hito a esta historia: anunció que llegó a un acuerdo con sus acreedores bancarios para refinanciar parte de sus deudas y así extender su complicada supervivencia.
La cifra a reestructurar no fue comunicada, pero el pasivo financiero corriente de la compañía sumaba $2.588 millones a fines de 2020, y tiene deuda bancaria en situación crítica por $1.748 millones.
"La sociedad ha alcanzado un acuerdo de reestructuración respecto de su deuda financiera con las entidades bancarias acreedoras que permitirá superar la situación de mora en que se encuentra. Al momento se están redactando los documentos correspondientes con cuya suscripción se formalizará este acuerdo", informó la empresa en una nota enviada a la Comisión Nacional de Valores.
El sintético aviso coincidió con la presentación de los resultados del trimestre cerrado el 30 de noviembre de 2020, en el cual se detallan las complicaciones operativas (y su impacto en las cuentas de Carsa) que sufrió la cadena de electrodomésticos como consecuencia de la pandemia.
"En el período de tres meses finalizado, las ventas llegaron a $1.311 millones. Dichas ventas arrojaron un porcentaje acorde al promedio de la industria", destaca el informe. La caída fue de 19,7% contra el mismo período de 2019 cuando las ventas habían sido de $1.633,6 millones.
Aunque la caída también se explica porque en 2019 la cantidad de metros cuadrados destinados a ventas eran 49.333 contra los 32.516 metros de 2020 como consecuencia de las restricciones sanitarias.
?La declaración del covid-19 como pandemia por la Organización Mundial de la Salud, en marzo del año pasado marcó un antes y un después desde el ejercicio pasado continuando en el actual ejercicio también. De la evolución de las distintas medidas adoptadas tanto por el gobierno nacionales como los gobiernos provinciales se fueron normalizando las actividades comerciales. A la fecha de cierre, aún existen jurisdicciones con restricciones que complican el desarrollo normal del negocio", destacó Carsa.
Los pasivos financieros corrientes sumaban $2.588 millones. Y los no corrientes eran $1161 millones. Además, Carsa mantiene compromisos por $944,9 millones por dos series de Obligaciones Negociables. En el último trimestre de 2020 la compañía emitió dos nuevos fideicomisos, correspondiente a las series 200 y 201 por un monto de $436,79 millones.
Según los datos del Banco Central, Carsa mantiene una deuda de $29,5 millones por cheques rechazados y acumula una deuda bancaria de $1.748 millones, la mayoría en situación problemática, con alto riesgo de insolvencia o directamente irrecuperable, según la nomenclatura del organismo.
En la comunicación a la CNV, la compañía aseguró que "se encuentra renegociando el pasivo financiero con deudores bancarios y bonistas, garantizando abastecimiento con proveedores brindando garantías de pago, y adhiriéndose a una moratoria amplia para regularizar el saldo impositivo y aliviar la carga financiera".
Carsa también mantiene deudas comerciales por pagar por $1.607 millones, de las cuales $1.063 corresponde a proveedores.
Frente a este contexto, destacó: "Respecto de la viabilidad futura de la compañía, se considera que oportunamente se podrá honrar los compromisos asumidos, siempre que se logre normalizar el abastecimiento, lo cual permitirá continuar con la habitualidad del negocio, para lo cual será indispensable el respaldo de proveedores, bancos, inversores, etc., para beneficio de todos".
Fuente: Ámbito Financiero
