Macri se relanzó, pidió más lugar en el Gobierno y criticó al "entorno" de Milei
"En el siglo XXI nadie se casa sin antes convivir", dijo sobre la fusión
Como un viaje en el tiempo. Reflotando la estética de viejos actos y rodeado de sus dirigentes más fieles, Mauricio Macri reapareció anoche para reanimar el PRO de cara a la campaña legislativa del próximo año e intentar ubicarse como mediador y garante del cambio que encara el Gobierno de Javier Milei.
Macri, ahora como titular partidario, busca consolidar su liderazgo en medio de la interna con la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y para eso convocó al encuentro que se realizó en el Arenas Studios del barrio porteño de La Boca.
Entre los presentes estuvieron el ex secretario de Ambiente, Sergio Bergman, el ex ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, el diputado nacional Hernán Lombardi, el intendente de General Pueyrredón, Guillermo Montenegro, la intendenta de Vicente López, Soledad Martínez y el titular de la asamblea nacional del PRO, Martín Yeza.
Tras una defensa de su gestión de gobierno, que "sentó las bases del cambio, como generosamente el Presidente lo reconoce", Macri lamentó que entre 2019 y 2023 "fuimos más Juntos que Cambio". De ahí en más, todo el mensaje estuvo centrado en su vínculo con la actual gestión y el estrecho margen por el que pretende que transcurra.
"Milei tiene pendiente la construcción de equipos" para gobernar, señaló tras ponderar la gran cantidad de dirigentes propios que se sumaron a los equipos de gobierno. Revelando el tenor de la charla que mantuvo con Milei días atrás -conocida recientemente- señaló que el primer mandatario le planteó la alternativa de fusionar fuerzas de aquí en más.
"Vamos de menor a mayor", refirió que le contestó y señaló que "en el siglo XXI nadie se casa sin convivir previamente".
Incluso, bromeó con que lo expresó en términos más vulgares.
En el doble juego de aliado incondicional y "enemigo íntimo", Macri aseguró que "lo que pudimos ayudar al Presidente fue a pesar de su entorno". La sorpresiva acusación no ahondó en destinatarios explícitos, pero sus palabras encuentran en Karina Milei y Santiago Caputo sus destinatarios ideales.
"Es un desafío ayudar a quien no está dispuesto a ser ayudado", expresó para dejar en claro por dónde venían las críticas. ?El presidente Milei tiene absoluta claridad en la dirección y las ideas, pero hay una debilidad en la capacidad de implementarlas?, sostuvo el ex jefe de Estado.
Además, le reclamó al Presidente que "todavía muchos organismos están en manos de Sergio Massa y su gente", al tiempo que no se cansaba de machacar con la idea de la necesidad de construir equipos para la gestión. Más sutil, a la hora de marcar diferencias, previamente había destacado que durante su gestión ningún periodista se sintió amenazado.
Vivado constantemente por su gente, mas locuaz que de costumbre, Macri se lanzó al ruedo nuevamente. Su plan está atravesado por un estrecho paso.
Fuente: BAE
