Un avión despistó en San Fernando y se incrustó en una casa: dos muertos
Volvía de Punta del Este. La aeronave, privada, chocó en una zona de viviendas y se prendió fuego. Fallecieron el piloto y el copiloto. No hubo heridos entre los vecinos de la zona.
Humo negro, más de tres explosiones, angustia y desesperación. Fue lo primero sintieron los vecinos del "Barrio Aviación", en San Fernando.
Ahí, a las 13.19 de ayer, un avión privado perteneciente a la familia del empresario Jorge Brito se despistó, pasó el alambrado perimetral del Aeropuerto Internacional de San Fernando y se estrelló contra una casa. Venía de Punta del Este, Uruguay. Como consecuencia se produjo la muerte del piloto y el copiloto, y pérdidas materiales para familias de la zona afectada.
Las miradas y los murmullos pintaron cada esquina. Los vecinos se las ingeniaron para salir con agua fría y refrescos para paliar el calor abrasador de una tarde de diciembre.
La pregunta recurrente entre ellos fue: "¿Alguno tiene luz en la casa? ¿Llamaron a Edenor?".
La respuesta en todos los casos era "no vuelve por ahora".
Todo el barrio sin luz y en la calle, con los ojos puestos en ese cruce de José Terry y Charlín, donde se emplazaron los restos del avión.
Una cinta de "peligro" se colocó para proteger el perímetro, que incluyó la casa destruida y tres autos que corrieron la misma suerte.
Carina Santana era una de las que observaba el escenario desde la calle Antártida Argentina y José Terry, justo a la vuelta del lugar en donde se produjo la catástrofe. Como vecina de muchos años sabe que esto ocurre frecuentemente, pero nunca tuvo esta magnitud.
"No es la primera vez que pasa. Ya había pasado el año pasado, y otros años también. Pero siempre fueron avionetas, nunca aviones. Nunca vimos algo como lo que pasó, es la primera vez que entra por la calle un avión, se prende fuego todo. En los videos que vimos se ve cómo sigue de largo de la pista. Habría que buscar una solución para que no pase de nuevo, es que ese aeropuerto antes solo recibía avionetas y ahora hace vuelos internacionales", explicó Carina.
Carina aseguró que "ahora los aviones pasan todo el tiempo, de noche también, y a veces de lo cerca que pasan, pareciera que te peinan".
Apuntó al crecimiento del aeropuerto como un miedo que hasta les hace preguntarse si deberían seguir construyendo sus casas.
Tamara Ponce, otra de las tantas personas que se acercaron, añadió: "Todo pudo haber sido peor, pero justo hoy no había niños en la calle jugando y Narcisa, la vecina afectada, pudo ver con tiempo al avión. No lamentamos la pérdida de vecinos, aunque sí de los pobres pilotos. Pero la familia de Narcisa lo perdió todo, quedando nada para las Fiestas. La impotencia fue también por no poder ayudarlos sabiendo que estaban ahí adentro. Es todo muy triste". Las dos mujeres remarcaron en diálogo con Clarín que hubo una cantidad de estruendos incontables, pero que están seguras que fueron más de tres.
La cortina de humo negro duró varios minutos. Recién a las 13.23, cuatro minutos después del accidente, la Jefatura de la Unidad Regional de Seguridad Aeroportuaria I del Este de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) se enteró de lo sucedido.
Entonces la PSA se hizo presente junto a Bomberos de la Policía Federal de San Fernando, quienes una vez que extinguieron el incendio informaron que en su interior yacían dos cuerpos calcinados.
Trascendió que el avión era un Bombardier Challenger 300 matrícula LV-GOK. Este pertenecía a la familia Brito, dueños del Banco Macro (Jorge Pablo Brito también es presidente de River Plate), y que retornaba de un vuelo a Punta de Este, en donde bajaron todos los pasajeros.
Solo quedaban adentro el piloto y el copiloto: Martín Fernández Loza (46) y Agustín Orforte (35).
Fuente: Clarín