El Gobierno reforzó la seguridad en las fronteras por el ataque de Irán
El portavoz presidencial indicó que están en alerta "ante cualquier episodio" que "llame la atención"; preocupa la entrega de pasaportes a iraníes en Bolivia y reabren embajadas en Teherán y Tel Aviv
Horas después del categórico apoyo de la administración de Javier Milei a Israel en el marco de los ataques que recibió de Irán con misiles y drones, el Gobierno confirmó ayer que incrementó la seguridad en las fronteras, en prevención de un eventual ataque.
"Se ha aumentado el nivel de seguridad", aseguró el vocero presidencial, Manuel Adorni. Sin embargo, el Ministerio de Seguridad informó ayer por la tarde que en determinados lugares la alerta había sido llevada a "moderada"
En su habitual conferencia de prensa matutina, el funcionario dijo que "el Presidente no ha recibido amenazas". Y rechazó que el apoyo incondicional de Milei a Israel ponga al país como eventual blanco de futuros ataques terroristas.
"No consideramos que ponernos de frente a un problema que tiene el mundo nos haga un blanco o cambie la situación en un país que ya tuvo dos atentados", reforzó Adorni.
Se refirió así a los ataques a la embajada de Israel, en 1992, y a la sede de la AMIA, en 1994, perpetrados por la organización terrorista Hezbollah, financiada por Irán, según confirmó en su reciente fallo la Cámara de Casación Penal. El portavoz consideró también que "el ataque de Irán no es solo a Israel, sino a Occidente, a la libertad individual, a los derechos de las mujeres y a características del mundo libre".
La afirmación llegó un día después de la reunión del comité de crisis, encabezado por el Presidente, que debatió el complicado panorama en Medio Oriente y sus implicancias para el país.
"Consideramos que todo el mundo libre está amenazado. No tenemos más que ponernos de lado de los que defendemos el mundo libre", reiteró Adorni.
Así marcó una continuidad con las declaraciones que el Presidente suele dar para explicar su cercanía con el Estado hebreo, aliado clave de Estados Unidos en la región.
Fuente: La Nación
