El Pollo Sobrero denuncia a la CGT de 'traidores' y defiende el paro: 'Le arrancamos la medida a una manga de cagones'
'Este paro no es de la CGT, es un paro que le arrancamos a la CGT', afirma Rubén 'Pollo' Sobrero, que acusa a Roberto Fernández, de la UTA, de usar 'una mentira' para no sumarse. Cuestiona a la conducción gremial: 'La CGT es una manga de cagones tremenda... la palabra no es cagones, es traidores'. Y marca distancia: 'Yo camino entre todas las columnas, me saludan, se sacan fotos. Otro no puede pasar ni en pedo, necesitan un ejército de guardaespaldas'. También critica a su propio gremio: 'Nuestro secretario general avala la privatización del Belgrano Cargas y los despidos porque se lleva el 10% de las acciones'.
En una entrevista candente, el secretario general de Unión Ferroviaria, Rubén "Pollo" Sobrero, no solo justificó el paro nacional sino que lanzó durísimas críticas contra la conducción de la CGT, a la que acusó de "traicionar" a los trabajadores. Además, diferenció entre sindicalistas "honestos" y aquellos que "acuerdan con las empresas".
"Veníamos tranquilos, pero tenemos paro", arrancó Sobrero, en diálogo con un medio local, antes de ironizar sobre el interés periodístico: "Sí, me llamás solamente cuando hay paro". El dirigente, conocido por su estilo frontal, no dudó en señalar las fracturas internas del movimiento obrero: "Hay un sindicalismo compuesto por distintas categorías. Algunos viven como cualquier persona que defiende a los trabajadores; otros andan en Mercedes Benz y tienen casas... ¿De dónde sale ese choreo?".
"La CGT es una manga de traidores"
"No son cagones, son traidores. Están para garantizar intereses ajenos, no de los laburantes. Muchos de sus dirigentes pactan con las empresas y avalan despidos, como pasó con los 1.300 compañeros ferroviarios. Mientras ellos viajan en Mercedes Benz, nosotros peleamos por los que sufren".
El paro, según Sobrero, no fue una iniciativa de la CGT, sino una medida que "le arrancamos" a la central obrera. "Muchos no querían hacerlo. El único que se animó a decir 'yo no lo hago' fue Fernández (Roberto, de la UTA), usando la mentira de la conciliación obligatoria. Todo el mundo sabe que es falso, pero le convenía salir a trabajar", disparó. Y agregó: "Este impresentable de Roberto Fernández sacó los colectivos, pero gracias a eso podemos medir si estamos equivocados. Los colectivos iban vacíos, la estación de Castelar estaba desierta? El paro es muy fuerte".
Sobre la resistencia de la CGT, Sobrero fue aún más contundente: "La CGT es una manga de cagones. Con Alberto Fernández, con Cristina Kirchner? Ahora le tuvimos que arrancar el paro porque no tenían huevos". Ante la sugerencia del entrevistador de moderar el lenguaje, rectificó: "La palabra no es 'cagones'. Es 'traidores'. Están para garantizar los intereses de otros, no de los laburantes".
"El paro se mide en colectivos vacíos"
"Roberto Fernández (UTA) mintió con la conciliación obligatoria para no sumarse. Pero gracias a su impresentable decisión de sacar los colectivos, vimos la verdad: las unidades iban vacías, la estación de Castelar desierta. Esto demuestra que el paro es fuerte y la gente lo respalda".
Sin embargo, aclaró que "no todos son iguales", destacando a figuras como Néstor Segovia: "Podés tener diferencias políticas con él, pero es un tipo honesto que representa a los laburantes". En contraste, apuntó contra su propio gremio: "Nuestro secretario general solo se preocupa por el reglamento del Belgrano Cargas. Avala la privatización y los despidos: hay 1.300 compañeros en la calle y no abrió la boca".
Consultado sobre si ciertos sindicalistas "le hacen el juego al gobierno" al exhibir lujos, Sobrero retrucó: "Preguntale a Milei qué prefiere: que estemos nosotros o los traidores. Todos los putean en un paro, pero después negocian con ellos".
El líder ferroviario también reflexionó sobre la necesidad de "limpiar" el movimiento obrero: "Yo puedo caminar entre las columnas de las marchas sin guardaespaldas. Otros no se animan ni en pedo? Eso hay que cambiarlo".
"Un sindicalista camina sin guardaespaldas? o no es sindicalista"
"Yo paso entre las columnas de las marchas, me saco fotos con los compañeros. Otros necesitan un ejército de custodios. Eso hay que limpiar: si no confiás en tu gente, ¿qué defendés? Los dirigentes honestos no temen a los trabajadores, temen a los que los traicionan".
Concluyó con un mensaje de autocrítica y firmeza: "Si la sociedad no está de acuerdo con el paro, lo aceptaremos. Pero nosotros padecemos a diario a dirigentes que son multimillonarios y pactan con las empresas. Moriré con mis ideas, pero sin venderme".
El paro, más allá de su impacto inmediato, dejó al descubierto una grieta profunda en el sindicalismo argentino: la que separa a quienes, como Sobrero, se jactan de "caminar entre los trabajadores", de aquellos que, según él, "viajan en Mercedes Benz y negocian a espaldas de los laburantes".
Fuente: Ejes de comunicación