Shock electoral Ganó Milei, Bullrich superó a Larreta y el kirchnerismo quedó tercero
El libertario, con 30%, obtuvo más que la suma de los candidatos de JxC; derrumbe histórico peronismo y de Massa
Más que una elección, fue un terremoto. La sorpresa que in-cubaba una sociedad hastiada se encarnó ayer en Javier Milei, impensable ganador de las PA-SO presidenciales. Patricia Bullrich derrotó por casi 6 puntos a Horacio Rodríguez Larreta en la batalla de Juntos por el Cambio y el peronismo se hundió en un fa-mélico tercer lugar que deja mal-herido al ministro de Economía, Sergio Massa, para enfrentar la digestión de los mercados de es-te viaje a lo desconocido. Nadie lo vio venir. La Libertad Avanza, el partido fundado por Milei, sacó 30,2% de los votos, ganó en 16 provincias y se impuso tanto en barrios populares como en los pueblos prósperos de la Argentina productiva. La suma de Bullrich y Larreta apenas ro-zó el 28,2% en el país, una regresión incluso respecto del fiasco de Mauricio Macri en las primarias de 2019. Unión por la Patria arañó un 27,2%, el peor registro histó-rico del peronismo. Massa juntó 21,3 puntos y Juan Grabois, 5,8%. Un número basta para mensurar la sangría: en las PASO de 2019 la fórmula Alberto Fernández-Cris-tina Kirchner sacó 12,2 millones de votos; esta vez, con sus dos postulantes merodeaba la mitad. Es un escenario de tercios casi perfecto, pero solo uno pudo fes-tejar genuinamente. El salvavidas que mantiene a flote al peronismo fue la provincia de Buenos Aires, donde quedó prime-ro y Axel Kicillof lideró el tramo de gobernador con 3 puntos de diferencia sobre Juntos por el Cambio (Néstor Grindetti superaba por un suspiro a Diego Santilli). En la ciudad de Buenos Aires, Jorge Macri derrotó por 1,5 pun-tos al radical Martín Lousteau y será el candidato oficialista para la sucesión de Larreta, sin grandes amenazas a la vista. Entre los dos sacaron 55,9%.
El auge de Milei y la victoria de Bullrich en JxC configuran un duelo por el poder entre dos candidatos de identidad muy definida y que han mostrado afinidades ideológicas en tiempos recientes. Ambos fueron blanco del discurso del miedo que empleó Massa en su campaña. Al ministro le urge encontrar un mensaje que lo reponga en el ring.
El economista no tenía competencia interna, pero celebró haber derrotado al enemigo sobre el que construyó su utopía libertaria: el sistema político. Prometió que su fuerza "no solo dará fin al kirchnerismo, sino también a la casta parasitaria, chorra e inútil que hunde a este país". Se arrogó ser "la única oposición".
En JxC ensayaban risas y escondían el llanto. Bullrich le ganó a Larreta, pero no vio venir el sorpasso por el flanco derecho. Un aire de desconcierto hermanaba a vencedores y vencidos. Soñaban con el fin del kirchnerismo, sin dimensionar que el verdugo podría ser otro.
Bullrich dio la cara a las 23.28 con un discurso triunfalista, en abierto desafío al tablero del escrutinio: "Hoy tenemos motivos para celebrar juntos -dijo-. Y es la oportunidad que nos han dado de conducir y liderar un cambio profundo para la Argentina. Quiero ratificar que Juntos por el Cambio ha hecho una gran elección en todo el país". Felicitó a Milei y le hizo un guiño, como si ella hubiera sido la ganadora y no al revés. A Larreta lo invitó a subir al escenario, junto al candidato a vice, Gerardo Morales. "Hoy estamos más juntos que nunca", concedió el derrotado. Bullrich le agradeció especialmente a Mauricio Macri, que también pasó al frente. "Se viene un cambio de era", auguró, con dificultades para transmitir entusiasmo. El expresidente tuvo el consuelo de que su primo quedó bien
Fuente: La Nación