Córdoba: el escrutinio definitivo ratificó que el peronista Llaryora le ganó a Juez

Le sacó una diferencia de 3,33% al cambiemita, quien se resistía a reconocer su derrota con todas las letras.

Diez días después de la elección y con Luis Juez sin querer admitir con todas las letras que había caído derrotado en la carrera por la gobernación de Córdoba, el Tribunal Electoral de esa provincia declaró ayer oficialmente ganador al peronista Martín Llaryora. De acuerdo con el escrutinio definitivo, el flamante gobernador electo le ganó a su rival opositor por 3,33 puntos. 
Martín Llaryora cosechó 870.935 votos (45,19%) y Luis Juez, 806.541 (41,85%). El kirchnerismo, que se presentó con el sello Creo en Córdoba de Todos, quedó sexto: obtuvo apenas 43.186 votos. 
El escrutinio definitivo determinó que Juntos por el Cambio se quedará con el control del Tribunal de Cuentas de la provincia. La Legislatura Unicameral quedará repartida en partes iguales entre ambos partidos mayoritarios (33 legisladores cada uno); las 4 bancas restantes pertenecen a diferentes fuerzas. Aunque será una situación inédita, el oficialismo cordobés entiende que retendrá su control. 
En la noche de la elección, y bajo el argumento de que se había demorado la carga de datos del escrutinio provisorio, el cambiemita Juez exigió es- perar el conteo definitivo antes de admitir su eventual derrota. 
En el provisorio, Llaryora le había sacado 3 puntos de ventaja (42,76% contra 39,76%). Juez trató luego de "bandidos" y "tramposos" a Llaryora y al actual gobernador de Córdoba, el peronista Juan Schiaretti. 
Pero a mitad de la semana pasada, y apenas iniciado el conteo final, ya había dado señales púbicas de que reconocía su derrota. "Ya está, no tengo esperanzas de revertila", sostuvo hace una semana. 
Ayer, tras la difusión del resultado Juez tuiteó: "Después del bochornoso proceso electoral que nos tocó vivir, transcurrido 10 días de la realización del comicio y con la confirmación de que Martín Llaryora es el gobernador electo, primero lo felicito y le deseo una buena gestión". 
Llaryora, por su parte, se acordó de las denuncias de Juez tras la oficialización del resultado: "Lo importante es que los vecinos pueden ver quien dijo la verdad y quien mintió. Todos sabían los resultados, lamentablemente hubo un grave error pero se podría haber subsanado porque to- dos sabíamos que la tendencia era irreversible", dijo a la prensa. 
Con el triunfo de Llaryora, el peronismo de Córdoba logró conservar la provincia, que administra desde 1999 cuando fue electo por primera vez José Manuel de la Sota. 
De la Sota -quien falleció en un trágico accidente de tránsito en 2018- y Schiaretti armaron un esquema en el que se fueron sucediendo mutuamente en el poder provincial durante casi un cuarto de siglo. 
Llaryora asumirá el próximo 10 de diciembre. Una de las incógnitas es qué sucederá con el staff gerencial que maneja la provincia y que lleva años en las gestiones provinciales. 
La noche de la elección, y tras adjudicarse el triunfo, Llaryora lanzó a modo de aviso: "Esta fue la elección donde hay una generación que se retira, y una generación que ingresa". 
Desde abajo del escenario lo escuchaba Schiaretti, precandidato a presidente por Hacemos por Nuestro País. 
Hoy a las 18, en el porteño hotel Intercontinental, el cordobés lanzará su campaña junto a su candidato a vice, Florencio Randazzo 
 

Fuente: Clarín